LA MISIÓN (vocación):
¿Qué tengo que hacer yo en la vida?
¿Cuál es mi misión?
¿Cómo ayudar a la humanidad, que puedo aportarles?
Esta vieja aspiración, inquieta y desorienta a muchos seres humanos, como algo esencial en sus vidas. La verdad es que en unos casos, el afán de ayudar o salvar a los demás viene de ocultos sentimientos de culpabilidad o por identificación o introyeccion del sufrimiento "ajeno". Y en otros casos, por la búsqueda de aceptación y reafirmacion de la importancia personal.
Las diferentes filosofías, utopías, ideales y religiones, suelen ser el alimento estimulador de esta arraigada inquietud de la "misión" en la vida.
No existe tal cosa, como misión existencial, espiritual o cósmica. La mente humana esta diseñada para procesar los innumerables estímulos que le llegan, dispone de millones de programas especializados en procesos de adaptación al medio, manteniéndola en constante actividad consciente y subconsciente. La actividad de la mente es automática, sus programas, no solamente tratan de conservar la estabilidad de la salud física y mental del individuo, si no que también se suma a los procesos de la mente colectiva de la especie humana (como herramientas de la naturaleza).
El ser humanó es un elemento ínterrelacionado con los demás individuos de su especie, con todas las especies vegetales, animales y con el resto del universo.
Esta básica reflexión, nos debería liberar de esas inquietudes y tentaciones que emergen a la consciencia, intentando arreglar el mundo, como si salieran de la hondura de la propia alma.
Los programas de la vida, también se expresan y utilizan la mente humana como herramientas para el cumplimiento de las leyes de la Coherencia.
SOMOS UNA SOLA ENTIDAD... ÚNICA... puedes identificarte con la ola o gota del océano que te parezca... pero tu eres el OCÉANO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario